Sunday, December 20, 2009

Companero

Es hora de bajar los fusiles compañero, el campo esta sembrado de bajas y los sueños ya nadie los recuerda, y los que quedan que creíamos leales, abandonaron los campos hace ya mucho tiempo

-Herido de muerte estoy y debo terminar!

Terminar que? si todo esta perdido! Hemos perdido compañero, no hay nada mas por que luchar. Las “tácticas y estrategias” nos fallaron compañero …perdimos y no queda nada mas que campos destruidos
Compañero descanse, la herida es de muerte para aun no llega ese momento, venga Ud quien fue mi comandante y que en la guerra librada se volvió mi compañero, descanse en mi, yo lo sostengo, no vea en mi otro enemigo que aunque le haya fallado, he luchado a su lado.

-Debo aun destruir lo que me ha traicionado, pero no alcanzo a verlo, se me pierde en la niebla!.

No, no hay bruma alguna comandante, es la sangre que le nubla la mirada, es la herida que lo lleva a desvariar, es el cansancio que lo ha enceguecido…es la derrota que envilece y nos aleja de lo que fuimos un dia; no hay nada mas, solo bosques vacios y Ud. y yo en este invierno crudo

-Quien es Usted? No le conozco, déjeme levantarme no ensucie mas mi traje claro…

Míreme!, reconózcame!, soy el que queda, quien no ha abandonado, permanezco aquí para sostenerlo como un dia le dije cuando llegue la hora y no haya mas nadie; soy yo, su compañero, el de siempre, el amado, el fiel, el de nobleza extrema, y si herido de muerte muchas veces equivoque mi blanco, jamás abandone al que fue mi compañero. Venga no se pierda mas por el campo vacio, recuestese en mi hombro, confie nuevamente.
Detenga el movimiento no pierda su mirada, vea en mi quien lo sostiene jamás quien lo destruye, no me hiera compañero, no termine lo que es suyo…. No me muestre su espalda, no abandone al herido!


No? debe entonces continuar la lucha? Compañero mio, sera hasta el ocaso, hasta la ultima gota, hasta que la niebla se ocupe de mis ojos
y si Dios lo permite, compañero, si Dios nos lo permite, sostendré su mirada cuando llegue el momento y no estará solo compañero de treguas.
Compañero mio, esta ultima batalla me ha cansado de veras, finalmente hubo algo que venció mis ideales y se robo mi reservas;
necesito ahora detenerme un poco pues no encuentro mi centro ni lo que me sostiene….
mas si Dios lo permite y regreso de esta, compañero mío allí donde me necesite, mis brazos lo sostendrán para que Ud descanse

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