"...pero mudo, absorto y de rodillas,
Como se adora a Dios ante su altar
Como yo te he querido,
Desenganate, asi no te querran!
De Volveran las Oscuras Golondrinas" G. A. Bequer
No volverás a oir mi risa porque se habrá refugiado
en los labios de otro que no ofrezca mentiras,
ni volverás a escuchar mis pasos
que vuelven vacilantes al umbral de tu puerta,
Ni tampoco mi voz suave que musita tu nombre
mientras sostiene pensamientos tras un dia cansado,
ni mis carcajadas alegres
que provoquen las tuyas
en una noche tibia de un verano que escapa
Ni tampoco verás de nuevo en mis pupilas negras
destellos de arcoiris que reflejen las tuyas
ni sentirás mis manos suaves
recorriendo tus rostro para borrar las lagrimas
que yo misma un dia provocase,
ni sentirás mi brazo alrededor de tus hombros
como compañera amiga de caminos y surcos;
ni sentirás mis besos saciando tu deseo
ni escucharás mi llanto, ni tampoco mis dudas
Y no habrán de darse mas mañanas de encanto,
ni tardes de otoño, ni noches de sueño,
ni volverás siquiera a sostener mi mano
pretendiendo en silencio que deseas guiarme.
No volverás tranquilo a descansar la faena
sobre sabanas limpias que huelen a decencia
y que no estan manchadas con amores pasados
Ni volverás tampoco a caminar a mi lado
sin entender siquiera lo que la suerte ha traido
Tampoco escucharás la suplica en mis labios
o mi llamado cargado de esperanza,
ni sentiras mi angustia al saber que he perdido
ni tampoco mi aliento brindandote consuelo
No escucharás mi canto ni soñarás mis sueños
Ni oirás de mi el adiás que esta noche
ni mereces, ni aceptas, ni comprendes, ni lloras
y esperaras por siempre porque un dia regrese
aunque entiendas muy dentro que esta vez si he partido
B illescas
